Super recomendado para un fin de semana

Acogedora habitación, amable personal, disfrutamos de su excelente ubicación a solo cinco minutos de la estación de transporte público, lo cual facilitó nuestras exploraciones, además el desayuno era buffet libre, aunque no había muchísima variedad, todo estuvo muy bueno y sabroso.

No tiene que mejorar nada

El hotel tiene una ubicación privilegiada.

No tuvimos una experiencia confortable. Pedimos una cama doble y nos dieron dos camas individuales. Además, el buffet del desayuno fue muy limitado y no cumplió con nuestras expectativas. La recepción cierra demasiado temprano, y no había nadie para resolver nuestros problemas cuando llegamos.

cerca de monumentos y zonas para pasear por salamanca

me encantó que el hotel esté situado a menos de cinco minutos a pie de la Casa de las Conchas y el jardín de Calisto y Melibea, lo que me permitió disfrutar de maravillosos paseos por la ciudad y explorar sus bellos rincones a pie, además, la atención en recepción fue genial, ayudándome a encontrar aparcamiento rápidamente tras llegar.

Desayuno muy bueno y variado.

La ubicación del hotel es inmejorable, a solo unos pasos de la plaza mayor y en el corazón del casco histórico, lo que facilitó mucho nuestras salidas con los niños. Las habitaciones eran amplias y estaban muy limpias, con camas cómodas que hicieron que descansásemos bien después de un día de exploración. Además, el desayuno era delicioso y variado, ideal para comenzar el día con energía.

El único inconveniente fue la falta de un área de juegos o actividades específicas para los niños, algo que hubiera hecho nuestra estancia aún mejor.

La ubicación es fantástica, todo queda a un paso, como la Plaza Mayor. Me encantó el desayuno, realmente variado y de buena calidad, y el entorno donde se sirve es muy agradable. Además, la amabilidad del personal hizo que la estancia fuera aún mejor.

El desayuno era variado y delicioso, con embutidos de calidad. Disfrutamos mucho de la atención del personal, especialmente de Arancha y Antonio, que fueron muy amables. La habitación era amplia y cómoda, perfecta para nuestra estancia familiar con el bebé.

A mis hijos les habría encantado un área de juegos en el hotel.

La habitación era silenciosa y cómoda, ideal para descansar después de un día explorando. La amabilidad del personal destacó, siempre dispuesto a ayudar. Sin embargo, la ventana era pequeña y la insonorización dejaba un poco que desear durante la noche. El desayuno fue correcto, pero podría tener más opciones. Un detalle que me frustró fue que el zumo de naranja en la jarra no podía ser bien servido sin una cuchara larga.

el hotel está súper céntrico, a dos pasos de todo, la atención del personal es increíble, muy amables y atentos. el desayuno estaba riquísimo, con muchas opciones. además, la habitación era bastante amplia y cómoda. también me gustó que te ayuden con la info sobre el estacionamiento, es un detallazo. muy buena relación calidad-precio.

lo único mal fue un poco de ruido por la noche y no tienen estacionamiento propio.

La localización del hotel es simplemente perfecta, a un minuto de la Plaza Mayor. La habitación que ocupamos era bastante amplia y tenía un sofá, lo que hizo nuestra estancia más cómoda. Sin embargo, encontramos que la cama era un poco dura, no era viscoelástica, lo que dificultó un buen descanso. El baño también presentaba un par de problemas, la bañera resbalaba y la presión del agua dejaba que desear, sobre todo al lavar el cabello. En cuanto al desayuno, era variado, pero no excepcional. La selección de alimentos podría mejorar un poco. El personal en recepción fue muy amable y servicial, aunque la recepción cierra a las 20 horas, lo que podría ser un inconveniente si llegas tarde. El aparcamiento estaba a unos pocos metros, lo cual es un punto a favor. En resumen, una buena experiencia, pero con detalles por mejorar.

Maravilloso, maravilloso, maravilloso

Tuve una estancia increíble de 4 noches en una habitación superior doble. Antonio nos dio indicaciones que fueron clave para disfrutar de la ciudad al máximo. Además, el desayuno buffet era delicioso y el servicio, especialmente de Mónica, fue excepcional.

Lo recomendaría 😍❤️

una estancia memorable con vistas espectaculares desde el balcón del hotel!

Nos encantó nuestra experiencia en el Hotel Rua Salamanca. El personal fue increíblemente amable y siempre listo para ayudar. La habitación era espaciosa y el desayuno ofrecía una variedad deliciosa. Pasar tiempo en el balcón fue simplemente especial, ya que pudimos disfrutar de las procesiones de Semana Santa. Lo mejor de todo fue la ubicación. está a un paso de todo lo que queríamos conocer. Sin duda, ¡repetiría!

La habitación era cómoda, pero el desayuno no cumplió con mis expectativas.

El hotel está en el centro de la ciudad, ideal para explorar Salamanca a pie. Las habitaciones son amplias y bien decoradas, además el personal es super amable y te ayuda con todo lo que necesites. ¡El desayuno también estuvo genial!

Aunque la insonorización de las habitaciones podría mejorar, no fue un gran problema.

La ubicación es genial y el desayuno muy bueno. el ruido molesta un poco.